La verdad incómoda: por qué la mayoría de las propiedades no se venden y cómo evitarlo en 2026

Déjanos preguntarte algo, vender una propiedad debería ser un proceso relativamente sencillo ¿no?; publicas el anuncio, recibes llamadas, mensajes, muestras la casa y finalmente firmas el contrato de compraventa ¿cierto?. Al menos, así es como la mayoría de las personas lo imaginan.

bueno, desgraciadamente la realidad en este mercado es otra.

En México, miles de propiedades permanecen meses incluso años en venta sin recibir ofertas serias. Y aunque los propietarios suelen culpar al mercado, a la economía o a “la mala suerte”, en la mayoría de los casos la razón es mucho más simple, pero a la vez más incómoda: una propiedad no se vende debido a que el comprador no la percibe como una buena decisión estratégica.

Esta decisión es tanto emocional como racional.

Y todo empieza mucho antes de que te pidan una cita.

Hoy en día, el comprador tiene acceso a más información que nunca. En cinco minutos puede comparar precios, revisar mapas de zona, calcular distancias, identificar riesgos e incluso ver videos en YouTube que le explican cómo detectar problemas en una casa.

Esto significa que tu comprador ya está filtrando tu propiedad antes de que tú siquiera te enteres de esto.

Y aquí está el punto clave:

El 80% de las propiedades quedan descartadas sin ser visitadas gracias a ese primer vistazo.

No por el precio. No por la ubicación.

Sino por cómo se perciben.

Si una propiedad no transmite claridad, confianza y valor desde la primera impresión, simplemente se vuelve un anuncio mas entre miles.

No importa lo bonita que sea, no importa cuántos “me interesa” o "¿sigue disponible?" lleguen a tu WhatsApp, al final la gran mayoría solo te hará perder el tiempo.

La venta empieza realmente con tres factores:

La presentación, el precio y la información.

Cuando alguno de estos elementos falla, arrastra los otros dos o peor aún, existen situaciones en las que fallan los tres, el resultado es inevitable: pocas visitas, ofertas inexistentes o sin seriedad y por ende tu solo te llevas un desgaste enorme.

En 2026, vender una propiedad no se trata solo de subir fotos y esperar.

Se trata de entender cómo piensa el comprador moderno y darle exactamente lo que necesita para decir: “Esta vale la pena.”

Ahora estamos seguros que te debes estar preguntando "¿bueno y como es que evito todo eso de lo que tanto me hablan?"

Bueno, eso es relativamente sencillo, solo evita estas fallas:

• Propiedades mal presentadas visualmente (fotos y/o videos borrosos, mal iluminados y sin estructura).

• Precios que no siguen ningún criterio técnico.

• Descripciones que no resuelven dudas reales.

• Publicidad sin segmentación ni estructura en redes y portales especializados.

• Falta de documentos desde el inicio (esto genera desconfianza desde el primer momento).

• Citas improvisadas que no generan confianza.

Cuando trabajas cada uno de estos puntos de forma estratégica, la propiedad no solo “se vende”: se vuelve competitiva, destaca, genera visitas de calidad y se mueve mucho mas rápido.

Entonces se puede concluir que, la verdad incómoda es que ¡no se trata de suerte!.

¡Nunca se trató ni se tratara del mercado!.

Se trata de preparación, claridad y estrategia.

Y sí: cualquier propietario puede vender más rápido si sabe exactamente qué corregir y como hacerlo desde el inicio.